

El Asesino sin Rostro nos cuenta la historia de Michelle McNamara, mujer del cómico Patton Oswalt (The King of Queens), y su incansable búsqueda del asesino del Golden State. Un violador y asesino que tuvo atemorizadas a mujeres y parejas del norte de California durante décadas.
La singularidad de este true crime está en la investigación. Como bien me dijo un compañero de trabajo la semana pasada, no se enfocan en el criminal. Lo hacen desde el punto de vista de Michelle, una escritora que se obsesionó con este caso hasta su muerte, ayudando a su resolución meses después de su fallecimiento. Todo nace de ella, de sus entrevistas, de los pasajes de su libro y las entrevistas a todas aquellas personas que la rodearon en sus años de investigación. Incluso algunas de las víctimas supervivientes de Joseph DeAngelo.
En una narración en paralelo, vemos como va empeorando el estado de salud de Michelle (sus nervios, su consumo de medicamentos sin prescripción médica y su ansiedad) al mismo tiempo que va consiguiendo cada vez más y mejores pistas que le acercan al descubrimiento de ese asesino que tanto tiempo le absorbe en su vida. Sin embargo, no pudo llegar al final. La muerte llama a su puerta a finales de abril de 2016, cuando había conseguido decenas de cajas de pistas de la policía que le llevarían a la resolución del caso.
Con un total de seis episodios. Los creadores dedican el último de ellos a describirnos quién es Joseph DeAngelo, cómo era y cómo había sido su día hasta su encarcelación definitiva. También le dedican tiempo a la redención de las víctimas en una reunión especial que hacen de apoyo al día que sus años de angustia llegan a su fin. Y, como no, a la memoria de Michelle, a contarnos qué pasó después de su muerte: la edición de su libro, la promoción y el recuerdo que ha dejado en sus más allegados.
El Asesino sin Rostro: Un True Crime diferente que no ha gustado a todo el mundo.
Personalmente, me ha gustado. No creo que pretenda ser un true crime al uso, de hecho, es su diferente cambio de enfoque lo que le hace distinguirse de los demás. Es un homenaje a esa mujer que no se dio por vencida y que venció al monstruo incluso después de muerta.
Le daría una oportunidad, sin duda, pero no llegues a él pensando que vas a encontrar a policías persiguiendo e interrogando sospechosos porque no va de eso.
Deja una respuesta